¿Es “solo” ansiedad o hay algo más? Señales de que podría ser un trastorno de personalidad

La ansiedad es una de las condiciones más comunes en salud mental. Sin embargo, cuando los síntomas de ansiedad se acompañan de patrones de comportamiento y pensamiento rígidos e inflexibles, es posible que estemos ante un trastorno de personalidad. En este artículo, exploraremos las diferencias clave entre la ansiedad y los trastornos de personalidad, presentaremos el caso de Ana como ejemplo ilustrativo y discutiremos cómo la Terapia Focalizada en la Transferencia (TFP) puede ser una opción efectiva de tratamiento.

Ansiedad vs. Trastorno de Personalidad: ¿En qué se diferencian?

Ansiedad Generalizada:
La ansiedad generalizada se caracteriza por:
– Preocupación excesiva por eventos futuros.
– Sensación constante de tensión o estrés.

– Problemas de sueño (insomnio, despertares nocturnos).
– Miedo a ciertas situaciones sociales o eventos.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2019, 301 millones de personas padecían un trastorno de ansiedad, incluyendo 58 millones de niños y adolescentes.
Ansiedad en los Trastornos de Personalidad:

En los trastornos de personalidad, la ansiedad no aparece aislada, sino como parte de un patrón de pensamiento y comportamiento más profundo. Algunas características incluyen:
– Miedo intenso al abandono o rechazo: No es solo ansiedad social, sino un temor persistente a que las personas importantes te dejen.
– Cambios emocionales extremos en poco tiempo: Pasar de la calma a la angustia en minutos sin una razón aparente.
– Dificultad para mantener relaciones estables: Relaciones intensas pero conflictivas, con altibajos constantes.
– Sensación de vacío constante: Una ansiedad existencial que no desaparece con técnicas comunes de relajación.

Un estudio publicado en la Revista de Psiquiatría y Salud Mental señala que la prevalencia de distimia (un tipo de depresión crónica) a lo largo de la vida es de alrededor del 3%, siendo más alta en mujeres (4%) que en hombres (2,2%). Además, la comorbilidad entre distimia y otros trastornos de personalidad es muy elevada, alcanzando entre el 65% y el 100%.

Caso Clínico: Ana

Perfil de la Paciente:

Nombre: Ana
Edad: 28 años
Ocupación: Diseñadora gráfica

Síntomas Presentados:

Ansiedad constante y generalizada.

Episodios de ira intensa sin causa aparente.

Relaciones interpersonales inestables.

Miedo profundo al abandono.

Sensación persistente de vacío.

Historia Clínica:

Ana acudió a consulta refiriendo una ansiedad que no podía controlar, acompañada de cambios de humor abruptos y dificultades para mantener relaciones estables. A menudo sentía que sus amigos y familiares la iban a abandonar, lo que la llevaba a comportamientos impulsivos para evitarlo. También describía una sensación constante de vacío y falta de propósito.

Evaluación y Diagnóstico:

Tras una evaluación detallada, se identificó que, además de los síntomas de ansiedad, Ana presentaba patrones de pensamiento y comportamiento característicos del Trastorno Límite de la Personalidad (TLP). Estos incluían miedo intenso al abandono, relaciones interpersonales inestables, autoimagen inestable y comportamientos impulsivos.

Tratamiento Implementado:

Se propuso un plan de tratamiento basado en la Terapia Focalizada en la Transferencia (TFP). La TFP es una forma de psicoterapia psicoanalítica que se centra en la relación de transferencia entre el paciente y el terapeuta, explorando y clarificando aspectos de las experiencias relacionales tempranas interiorizadas que se manifiestan en la relación terapéutica actual. Este enfoque busca integrar la percepción de uno mismo y de las relaciones, promoviendo una maduración de la estructura de la personalidad y la superación de la patología del TLP.

Evolución:

Después de seis meses de TFP, Ana mostró una mejora significativa en la gestión de su ansiedad y emociones. Sus relaciones interpersonales se volvieron más estables, y desarrolló una mayor conciencia de sus patrones de pensamiento, lo que le permitió manejarlos de manera más efectiva.

Trastornos de Personalidad en los que la Ansiedad es un Síntoma Frecuente

Si te identificas con lo anterior, podrías estar lidiando con uno de los siguientes trastornos:

Trastorno Límite de la Personalidad (TLP): Intensidad emocional extrema, impulsividad y miedo al abandono. Se estima que alrededor del 80% de las personas con TLP tienen comorbilidades con otros trastornos, incluyendo la ansiedad.
Trastorno de Personalidad Evitativa: Miedo excesivo al rechazo, lo que lleva a evitar situaciones sociales. Existe una alta comorbilidad con trastornos del estado de ánimo y de ansiedad.
Trastorno Obsesivo-Compulsivo de la Personalidad (TPOC): Ansiedad extrema por el control y la perfección. Este trastorno a menudo coexiste con trastornos de ansiedad.

Datos Estadísticos Relevantes

Prevalencia de los Trastornos de Personalidad: Alrededor del 9% de la población sufre un trastorno de la personalidad. Estos trastornos suelen afectar en igual medida a hombres y a mujeres, aunque algunos tipos son más frecuentes en un sexo que en otro. Por ejemplo, el trastorno de personalidad antisocial es tres veces más frecuente entre los hombres.
Comorbilidad con Trastornos de Ansiedad: Un estudio encontró que la tasa de comorbilidad entre trastornos de ansiedad y trastornos de personalidad oscila entre el 35% y el 50% en pacientes hospitalizados, y entre el 50% y el 85% en pacientes ambulatorios.

¿Cuándo Buscar Ayuda Profesional?

Si tu ansiedad afecta tu vida diaria, tus relaciones o tu bienestar emocional, es importante buscar ayuda. La Terapia Focalizada en la Transferencia (TFP) puede ayudarte a entender el origen de estos.

No dudes en reservar cita con nosotros para llegar al origen de tus síntomas y poder sanar.